El presidente Yrigoyen y la comunidad argentino-armenia
Las instituciones armenias comparten más de un siglo de acción orgánica en Sudamérica. La mayor colectividad armenia de habla española se encuentra en Argentina y su afianzamiento coincidió con la aplicación de una ley electoral trasformadora de la vida política del país.
En 1910 había sido ungido presidente Roque Sáenz Peña, y en 1912 por ley nacional se pudo adoptar el sufragio universal, secreto y obligatorio, sólo masculino. Al triunfar en 1916 Hipólito Yrigoyen en la puja con los conservadores, la Unión Cívica Radical logró imponer a su candidato para la primera magistratura.
Libre expresión ciudadana
Ese gran avance democrático abrió el acceso a la irrestricta expresión cívica para poder optar por otras candidaturas, como la de los radicales, los socialismos y demás corrientes políticas. En los comicios presidenciales de 1916 la Democracia Progresista de Lisandro de la Torre estaba en caída, e Hipólito Yrigoyen obtuvo 339.332 votos contra 123.637 de la fórmula conservadora.
Para entonces, a pesar que nuestra comunidad estaba inmersa en el drama del Genocidio Armenio, actuó acorde a la circunstancia pero con una fuerte solidaridad. En los años 1911-1915 se habían constituido instituciones sociales, cofradías religiosas, agrupaciones políticas, asociaciones regionales y otras expresiones orgánicas. Armenios de habla árabe editaron periódicos que condenaron ese crimen de lesa humanidad y el emir Emin Arslan (de origen druso), primer y único representante del Imperio Otomano en Argentina denunció con firmeza el plan genocida de su gobierno, administrado por los Jóvenes Turcos.
La hermandad argentino-armenia
Centenares de refugiados armenios y de otros orígenes seguían ansiosos día a día los cables y los artículos periodísticos que llegaban desde Europa y Asia, conmovidos por las noticias del genocidio que habían podido sortear el cerco informativo del gobierno de Constantinopla. Argentina adoptó una posición neutral en la guerra, y más de un centenar de personas en una colectividad de algo más de seiscientos compatriotas respondió a la convocatoria, entre ellos militantes de la FRA-Tashnagtsutiún y del PSD Henchakian. Jornaleros y obreros llegados mayoritariamente de la Cilicia armenia aportaron parte de sus magros salarios para el fondo de la resistencia, y Harutiún Tagtachian (más tarde fundador de Diario ARMENIA), organizó una colecta popular, como también lo hicieron otros patriotas.
Problemas económicos y sociales
Nuestra comunidad también compartió los efectos de la Primera Guerra Mundial, y la mitad de los 1.200 residentes debió partir al hemisferio norte en las vísperas de la conflagración. Como consecuencia de la guerra se registró una importante baja de las exportaciones durante los dos primeros años de Yrigoyen. La economía registró una importante inflación, los salarios cayeron, y creció la desocupación. Algunos encararon emprendimientos familiares y surgieron pequeños comercios de artesanos cuentapropistas.
El voto femenino en Armenia
Invitada por la Audición Armenia Gomidás de Montevideo, la profesora Manukian, hija de Aram Manukian, fundador de la República Libre de Armenia, visitó hace años Sudamérica. Recordamos la valentía de su testimonio, de la dura vida junto a su madre Gadariné, electa diputada del primer parlamento de la república. Fue la primera votación popular de un estado creado luego de nueve siglos de dominación extranjera en la Madre Patria, donde se logró que fueran electas tres mujeres. Mencionemos que el voto femenino argentino se lograría finalmente en 1952, gracias a la determinación de Eva Perón, reconocida como la “abanderada de los humildes”.
La personalidad de Hipólito Yrigoyen
En diálogo con la Revista “Veintitrés”, el historiador Norberto Galasso, que publicó una biografía titulada Don Hipólito (Colihue), lo definió como “una figura muy singular con características y rasgos muy propios”. Según Galasso: “Hubo muchas cosas que los radicales no reivindicaron como la neutralidad en la Primera Guerra Mundial. Al negarse a apoyar a Inglaterra y Estados Unidos se puso en contra a todos los partidos e intelectuales. Él consideraba, en la mejor tradición de los revolucionarios, que la guerra era una lucha por mercados y no una lucha entre la civilización y la barbarie o entre la democracia y el totalitarismo”.
Reconocimiento y festejo popular
Mayo figura en la historia compartida de Argentina y Armenia como el mes que unió para siempre a dos estados libres, por la gestión de la comunidad argentino-armenia. El 3 de mayo de 1920 el presidente Hipólito Yrigoyen rubricó el decreto de reconocimiento argentino de la República de Armenia, refrendado por el canciller Honorio Pueyrredón, y los festejos de la celebración del 28 de Mayo de 1920 se realizaron en pleno centro, en la calle Paraná 555, donde la colecta alcanzó los 30.000 francos, más que los 10.000 logrados el año anterior.
Testimonio para reflexionar
El 15 de mayo de 1920 varios diarios de Argentina se hicieron eco de las intensas gestiones que realizaba entonces nuestra comunidad en apoyo de la recién creada República de Armenia, libre e independiente para lograr su reconocimiento. Los comunicados decían:
El reconocimiento de la República de Armenia
El presidente de la nación, doctor Hipólito Yrigoyen, ha recibido un telegrama del señor (Avedís) Aharonian, presidente de la delegación de la República de Armenia, fechado el 12 de mayo de 1920 que dice así: “La Delegación de la República de Armenia de la paz, expresa su caluroso agradecimiento por el reconocimiento de Armenia. Estoy convencido de que nuestros dos pueblos están destinados a cultivar relaciones amistosas.- Aharonian.”
Agradecimiento al presidente Yrigoyen
La comunidad agradeció el gesto del gobierno de Yrigoyen, en una carta con pensamientos para reflexionar hoy también. La Unión Nacional Armenia (representación plenaria) tomó una posición clara y definida, al dirigirse al primer magistrado, con motivo de su reciente reconocimiento.
“Excelentísimo señor Presidente de la Nación Argentina de la Nación Argentina.- La Unión Nacional Armenia de Buenos Aires, reunida en asamblea general, ha resuelto por unanimidad de votos, presentar su más respetuoso homenaje al Gobierno de la Nación Argentina, como un testimonio de agradecimiento por su noble y generosa decisión de reconocer a la República de Armenia como un estado libre e independiente.
El gobierno argentino, al ser uno de los primeros Estados que ha reconocido la independencia de Armenia se ha hecho acreedor a la eterna gratitud, no sólo de los que recibimos los beneficios de este país hospitalario, sino al de toda la nación armenia, cuyos sentimientos interpretamos que en sus ansias de libertad, encontró el apoyo del pueblo generoso como el argentino para poder integrar el concierto de los pueblos libres de la tierra.
Sea, vuestra excelencia, depositario de esta manifestación sincera de los sentimientos armenios para el gobierno y pueblo argentino a quién aclama en estos instantes con las estrofas de su Himno patrio, uno de los pueblos libres del mundo”.
El histórico 10 de Agosto de 1920 se firmó en el Palacio de Sévres (Francia) el reconocimiento de Armenia por Turquía y el laudo arbitral del Presidente de los Estados Unidos W. Wilson estableció las fronteras occidentales de la Madre Patria. La alianza de kemalistas y bolcheviques precipitó la sovietización de Armenia.
Estamos transitando los últimos dos años previos al centenario y con nuestros actos también hoy podemos honrar los conceptos expresados en 1920 por la Unión Nacional Armenia, para honrar también a nuestro país, la Argentina.
Carlos Luis Hassassian