Madres de soldados fallecidos y la esposa del Premier piden por la paz
Ereván (RFE/RL).- Las madres de casi cincuenta soldados muertos en combate en el conflicto de Nagorno Karabagh, en especial durante los enfrentamientos de abril de 2016, afirmaron el sábado 15 de septiembre que se unirán a la petición de paz de Anna Hakobyan (a la derecha en la imagen), la esposa del primer ministro Nigol Pashinian.
Recibidas por la mujer del Premier en la propia oficina de este en Ereván, las familiares de los militares caídos instaron a las mujeres de Azerbaidján a unirse a ellas para detener el conflicto entre ambos países.
“Dejen que todas las madres del planeta se levanten. Nos dirigimos especialmente a las azeríes. Recientemente, en internet, ellas también pidieron que frenen los enfrentamientos. No queremos la guerra, ni seguir perdiendo a nuestros hijos”, dijo Hamest Nersisian, madre del capitán Armenak Urfanian, quien falleció durante la Guerra de Cuatro Días de 2016.
“Buscamos que finalmente se establezca la paz en la frontera, para que después de enviar a sus hijos al ejército, las madres no tengan que pasar por una espera insoportable para ver si retornan sanos y salvos. No queremos más personas como nosotras en la nueva Armenia”, dijo una de las mujeres. A su vez, otra agregó: “Lucho por los derechos de todas las familias que han perdido a sus hijos, padres y hermanos”.
En su discurso, Hakobyan confirmó que continuará con más confianza su campaña "Mujeres por la paz”, y que agradece especialmente este apoyo recibido. Además hizo hincapié en el hecho de que en Armenia los pedidos a azeríes provocan varias reacciones contrarias.
Lo que hace importante a este mensaje hacia las madres azerbaijanas es que nuestra sociedad no lo acepta totalmente. Después de mi discurso también recibí críticas de que no podía comparar entre las mujeres de ambos países. Pero yo quiero preguntarles si ser mamá tiene etnia, nacionalidad o religión”.
“Espero que su voz y la nuestra llegue a Azerbaidján y allí ellas también hablen en contra de la guerra. Si esto sucede, si nuestras filas crecen, podemos enviarle nuestros reclamos a los hombres que emiten las órdenes de abrir fuego”, expresó Hakobyan.
Además se dirigió hacia las esposas de antiguos y actuales funcionarios y a las de los empresarios para que contribuyan a la fundación creada por Hamest Nersisian y que lleva el nombre de su hijo. “Creo que habrá algunas que lo pensarán y llegarán a la conclusión de que los objetos valiosos que compraron mientras sus maridos estaban en el cargo no siempre se ganaron de manera justa. Al donar algunos de ellos a la organización podrían encontrar la paz”, comentó.
Ante el comentario de un periodista en referencia a que mientras se hacía este pedido las fuerzas armadas enemigas disparaban contra un pueblo armenio fronterizo, Hakobyan explicó que el llamado era para los familiares de los soldados y no en nombre del estado. También destacó el hecho de que al mismo tiempo Armenia realizaba ejercicios militares.
“La vida mostrará quién resulta victorioso. O ganamos y les hacemos deponer las armas para sentarnos en una mesa de negociación y tratar de resolver el problema, o perdemos y seguirán disparándose unos a otros. Quiero excluir esta última opción y confiar en que algún día prevaleceremos”, concluyó la esposa de Pashinian.