La sede de la FRA-Tashnagtsutiún en Gavar restaurada con aportes desde Argentina, Uruguay y Brasil
El 1º de agosto terminaron los trabajos de restauración de la sede de la Federación Revolucionaria Armenia, FRA-Tashnagtsutiún, de la ciudad de Gavar en la provincia de Kegharkunik de Armenia.
Gavar es una ciudad montañosa de 21 mil habitantes cerca del lago Seván con una infraestructura deteriorada que data de la época soviética. La desindustrialización de la economía, el proceso salvaje de privatización tuvo un impacto muy negativo en la población. Pero una lenta recuperación había comenzado gracias al interés de algunas empresas que habían comenzado a invertir en la zona antes de la pandemia.
Gavar también es una localidad donde se había formado una base de militantes de la FRA-Tashnagtsutiún después del regreso a Armenia del partido. Allí funciona una unidad partidaria (Gomideutún) con su sede donde se celebran las reuniones, se hacen encuentros con los habitantes del lugar y se coordinan las distintas oficinas de acción política, servicios sociales y juventud. La sede estaba sufriendo un deterioro edilicio importante y con la difícil situación socioeconómica al Gomidé local se le hacía cada vez más difícil asumir los costos de una restauración casi completa de las instalaciones.
“Como FRA-Tashnagtsutiún de Sudamérica habíamos asumido el compromiso de solidaridad con nuestros compañeros y compañeras de Gavar a partir de una propuesta del Buró del partido”, explicó al Diario ARMENIA Yanik Ketchian, el representante del Comité Central de la FRA-Tashnagtsutiún en Sudamérica. “Durante nuestras visitas a Armenia en los últimos años siempre hacíamos tiempo para encontrarnos con los responsables partidarios de Gavar y comenzamos a conversar sobre las distintas necesidades que tenían. Además del pedido de restauración de la sede, algo que urgía, decidimos encarar un proyecto más amplio y ambicioso que los que veníamos planificando ya que entendimos las necesidades”, siguió Ketchian.
“Entre compañeros y compañeras de Buenos Aires, Córdoba, Montevideo y Sao Paolo asumimos el compromiso y nos pusimos en contacto con una persona de la Comisión Económica del Buró que el Kerakuin Marmín, la instancia superior de la organización partidaria de la FRA-Tashnagtsutiún en Armenia, designó para supervisar los trabajos de restauración. Los trabajos se desarrollaban a un ritmo normal y recibíamos informes sobre los avances hasta que la situación se complicó por la pandemia en Armenia. Más allá a cierta demora, los trabajos se terminaron. Estamos muy satisfechos por el resultado y por el aporte que hicimos desde Sudamérica a la militancia política de la FRA en Armenia, más específicamente en Gavar”.
Más adelante Ketchian remarcó que “elegimos a Gavar como destino para nuestra acción solidaria porque estamos convencidos de la necesidad de ayudar a estas localidades urbanas o rurales de la República a evitar la despoblación y la emigración de sus habitantes a Ereván o, peor, al extranjero. Digo esto, porque empezamos con la sede de la FRA-Tashnagtsutiún, pero la idea desde nuestras bases, aquí en Sudamérica, es aportar también al desarrollo del bien y/o espacio público en Gavar y sus alrededores.”
Kechian concluyó diciendo que se entiende que nuestras instituciones y comunidades en Sudamérica enfrentan una seria crisis que se siente y se sentirá más fuerte en la post pandemia “pero no es una razón para encerrarnos en un ensimismismo que restringe nuestra identidad armenia en el espacio meramente local. Nos definimos como parte de una Diáspora cuya condición de existencia es la ayuda mutua entre las comunidades -y no hace falta decir que hoy la urgencia es las comunidades devastadas de Beirut por la crisis económica y la terrible explosión del 4 de agosto- y Alepo donde la pandemia se ha brotado muy mal; y nuestro vínculo esencial con Armenia con nuestra participación en distintas iniciativas amplias o especiales como esta”, definió el dirigente de la FRA-Tashnagtsutiún de nuestra región.