La ONU manifestó su preocupación por los mercenarios contratados por Turquía y Azerbaiyán en Nagorno Karabaj
La Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos lanzó un comunicado el 11 de noviembre en el que se expresa la preocupación del organismo por el uso de mercenarios y por las devastadoras consecuencias para la población civil del conflicto de Nagorno Karabaj.
Expertos de la ONU ya habían alertado de la presencia de mercenarios, en su mayoría sirios, en el frente de ataque. Según afirmaron, aunque mayormente se les prometió ganancias económicas, a varios se les aseguró que obtendrían compensaciones y nacionalidad turca para sus familias en caso de que murieran.
Los informes indicaron además que Turquía participó del reclutamiento y traslado de los hombres a Azerbaiyán, varios vinculados al Ejército Nacional Sirio, la organización paramilitar apoyada por Ankara.
“El supuesto papel de Turquía es aún más preocupante dadas las acusaciones similares abordadas a principios de este año por el Grupo de Trabajo en relación con su papel en el reclutamiento, despliegue y financiación de estos combatientes para que participen en el conflicto en Libia”, detalló Chris Kwaja, miembro del grupo de investigadores.
Desde el grupo manifestaron a su vez su preocupación por los repetidos informes de ataques deliberados sobre zonas pobladas de Nagorno Karabaj, alrededores y otras zonas alejadas.
“En este contexto, es aún más preocupante que los combatientes sirios desplegados en Azerbaiyán estén supuestamente afiliados a grupos armados que, en algunos casos, han sido acusados de crímenes de guerra y abusos contra los derechos humanos durante el conflicto en Siria”, concluye el informe.