Magda Tagtachian: “En Rojava, la lucha por geopolítica, la memoria y el amor romántico están al mismo plano”

08 de diciembre de 2021

El jueves 2 de diciembre se presentó “Rojava”, la última novela de la escritora y periodista Magda Tagtachian, en la Asociación Cultural Armenia (ACA).

Las palabras de bienvenida estuvieron a cargo de Agustín Analian, en representación de la ACA, quien destacó que “escritoras como Magda hacen llegar nuestro mensaje a través de un camino mucho más poderoso: la cultura. La fuerza emotiva de una novela no tiene comparación. La felicitamos por esta contribución que se suma a las que ya viene haciendo como periodista y por las que el Consejo Nacional Armenio la galardonó con la distinción Hrant Dink en 2018”.

Desde un escenario tapizado con alfombras orientales, Victoria Minoian cautivó al público con la recreación de una escena de “Rojava”.

A continuación, inició un diálogo moderado por Marga Djeredjian, entre la escritora y Genaro Press, editor de la novela que publicó Penguin Argentina, bajo el sello Plaza & Janés. La conversación con Tagtachian permitió al público conocer el backstage de la novela e indagar en los motivos que llevaron a la autora a escribirla. El editor no ocultó el entusiasmo que le provocó la obra cuando la escritora le comunicó el tema: “Me dijo, ‘voy a escribir sobre un ejército de mujeres’, y yo ya quería leer más”, confesó Press.

Entre la emoción de la sala colmada, la autora sorprendió con su peinado: una trenza con flores, en homenaje a las mujeres combatientes de Rojava. La trenza representa el entramado, las mujeres que se organizan en red para resistir el régimen de Erdogan y la amenaza de Estado Islámico. La trenza representa también los tres pilares sobre los que la población construye este modelo nuevo de sociedad en Rojava, una Administración Autónoma en el Norte y Este de Siria, controlada por el pueblo kurdo: igualdad de género; sustentabilidad ecológica y un sistema de gobierno equitativo y horizontal.

Magda reveló que la historia de estas mujeres la atrapó desde 2014 cuando las descubrió en pequeños recortes en los diarios. “Me impactaron estas combatientes civiles vestidas con uniforme militar, subidas a la caja de las camionetas, con sus fusiles AK-47 en alto y sus trenzas. Enseguida entendí que su lucha es mi lucha. Mi forma de sumar un granito de arena para nunca dejar de pedir justicia por el Genocidio Armenio y por las minorías”, sostuvo Tagtachian, autora de “Nomeolvides Armenuhi, la historia de mi abuela armenia” (2021, edición actualizada por P&J); y de “Alma Armenia” (2020, VR Editoras).

 “Aún no conocía Armenia cuando escribí “Nomeolvides”, que investigué en 2015 y publiqué por primera vez en 2016. Sin embargo, pude viajar por primera vez cuando Nomeolvides estaba en la planta impresora de Penguin Argentina. Más tarde entendí que pisar la Madre Patria en ese momento no fue una casualidad, sino que se trató de esas señales que nos da la vida. Aprender a leerlas es también el viaje del novelista. A partir de allí empecé un viaje interior muy profundo. Un volcán se despertó dentro mío y todavía sigue muy activo. A partir de hacer pie con esa búsqueda todos los viajes son posibles. La novela siempre propone un viaje real y un viaje metafórico, y eso permite muchas lecturas. Es una invitación a la reflexión, a extender nuestras propias búsquedas, a animarse a hacer pie con el propio deseo interior que es el motor de la vida. Lo escribí en el nuevo prólogo de Nomeolvides, la edición actualizada 2021, que trae 25 páginas más”.


Y claro, una cosa llevó a la otra, después de aquel primer viaje a Armenia y con Nomeolvides en impresión. “Después de narrar la historia de supervivencia de mi abuela, me di cuenta que tenía mucho más por contar. Entonces se desprendió como un gajo ‘Alma Armenia’. Y cuando terminé de escribir Alma, seguía tan cebada que de allí nació Rojava. En realidad, ustedes, queridos lectores me ayudaron. Solo tuve que leer sus cartas, donde me pedían saber más de Nané Parsehyan, el personaje de Alma Armenia, la prima de Alma, criada en la Armenia soviética bajo estrictas reglas del patriarcado. Una noche, desvelada, encontré un combatiente armenio en Rojava y se me hiló toda la novela en la cabeza. Salté de la cama a las cuatro de la mañana para escribir el argumento”, sonrió Magda y entonces, Valeria Cherekian levantó aun más la emoción entre el público. Interpretó el tema de amor narrado en Alma Armenia, “Chuni ashkharhe qez nman” (No hay nadie en el mundo como tu), de Razmik Amyan, y a continuación “Im anunes Hayastan E” (Mi nombre es Armenia), de Inga & Anush, con la audiencia que se unió con palmas y registrando cada momento con los celulares.


Luego, el editor Genaro Press continuó: “Es poco habitual que en una novela se cuenten historias donde mujeres traten de buscar su identidad en relación al padre, es más común plantearlo en relación a la madre. ¿Por qué lo decidiste así?”, quiso saber. 


“Quería mostrar la lucha contra el patriarcado que es un debate tan actual en Occidente, pero que también atraviesa la identidad en Medio Oriente”, sostuvo Tagtachian. Y continuó: “En Rojava, se vive el dilema de matar o morir, porque la amenaza de limpieza étnica y genocidio es permanente y también la violencia contra la mujer, que es siempre la población más vulnerable. Hablamos de mujeres que han padecido serios abusos. Todavía existen unas 3 mil mujeres yazidíes, cautivas de Estado Islámico, que son utilizadas como esclavas sexuales. Me refiero a niñas y mujeres muy jóvenes también. Incluso cuando logran rescatarlas, las propias familias las rechazan porque su honor ha sido mancillado. Esto es un drama y una lucha que hay que dar. Un debate en profundidad que nos debemos en el siglo XXI. En este contexto tan delicado, me pregunté si era posible -además- narrar un amor romántico sin faltar a la verdad. No voy a revelar cómo lo resolví –sonrió Tagtachian— para eso tienen que leer la novela”, enfatizó.

Marga Djeredjian se refirió a la actualidad política que caracterizan las novelas de Magda, siempre con una fuerte investigación periodística y donde se pueden leer temas candentes de la actualidad de Armenia, Artsaj, Azerbaiyán, Turquía y el norte de Siria. “Rojava, igual que toda mi obra, admite muchas interpretaciones, muchos viajes. La lucha geopolítica, la memoria, la identidad y el amor romántico están en el mismo plano. Como en la vida misma”, concluyó la autora. Los lectores se acercaron libro en mano para llevarse una dedicatoria y una firma de Magda, mientras disfrutaban de un vino de honor a cargo de Bodega Amalaya y Bodega Colomé.

Entre más flashes y selfies, sin ocultar su alegría, Magda se despidió con otra inquietante declaración: “No voy a parar de escribir”. ¿Habrá más para 2022?

Compartir: