El archimandrita Aren Shaheenian recibió el bastón de mando de la arquidiócesis de la Iglesia Armenia de Argentina y Chile por parte del arzobispo Kissag Mouradian
En una ceremonia colectiva, el jueves 15 de diciembre en la Catedral Armenia San Gregorio El Iluminador, se realizó el acto de traspaso de la administración espiritual de la arquidiócesis de la Argentina y Chile de la Iglesia Apostólica Armenia por parte de Monseñor Kissag Mouradian al archimandrita Aren Shaheenian, quien fuera designado “locum tenens” por Su Santidad Karekín II, Patriarca Supremo y Catholicos de Todos los Armenios.
Visiblemente emocionado, con voz calma y pausada, el Arzobispo Kissag Mouratian expresó que no deja el cargo sino la función y le deseó éxitos en su tarea al archimandrita Aren Shaheenian quien será el lugarteniente del cargo. Mouradian confirmó, además, que no se aleja de la comunidad y que se queda en el país ya que “finalmente se transformó en un argentino y un armenio de Argentina”.
“Estaré dispuesto para lo que haga falta, como hasta ahora”, afirmó Mouradian, quien agradeció la presencia de los fieles, de los invitados, de los representantes de otros credos y a la comunidad armenia que lo apoyó durante casi 50 años.
Como gesto de aprobación a la labor realizada brotó naturalmente un largo aplauso de los feligreses luego de las palabras de Kissag Mouradian que finalizaron con un pedido para que recen por él, citando a “su amigo” el papa Francisco.
Monseñor Mouradian hizo entrega del bastón de mando al lugarteniente Aren Shaheenian quien agradeció a Su Santidad Karekin II, Partriarca Supremo y Catholicos de Todos los Armenios, por haber recibido “tan alta responsabilidad” y por designarlo “locum tenens” de la Iglesia Apostólica Armenia de Argentina y Chile. Shaheenian agradeció también al arzobispo Mouradian por haberlo recibido en la arquidiócesis de Argentina hace más de tres años y por alentarlo y enseñarle “la forma de vida y las costumbres del pueblo armenio de la región”.
“A partir de este día estoy para servirlos más activamente ya que mi trabajo se concentrará en llegar a conocerlos más y en acercar a todas las ovejas al rebaño. Quiero decir que haré todo lo posible por recuperar a aquellos que se alejaron de la Iglesia, por el motivo que fuera”, agregó. Shaheenian evocó la figura del Buen Pastor “que hizo una revolución en nuestras vidas”.
Por su parte, el monseñor Pablo Hakimian, Eparca de San Gregorio de Narek en Buenos Aires y Exarca Apostólico para los armenios católicos de América Latina y México, aseguró que Kissag Mouradian “no solamente es un eclesiástico, un verdadero obispo, sino que es un hermano en la fe y un verdadero hijo de San Gregorio El Iluminador que siempre trabajó y seguirá trabajando por el ecumenismo”. “Lo que más nos une es llegar un día al ideal de una sola iglesia de Jesucristo, nuestro señor”, expresó.
En cuanto al archimandrita Aren Shaheenian, Hakimian sostuvo que “es un hombre lleno de fe y de sabiduría pero, por sobre todo, también lleno de hermandad” y agregó: “vengo a ofrecerle nuestra hermandad y nuestro gran cariño porque el pueblo armenio de Argentina lo merece”.
Más adelante Hakimian leyó la carta enviada por el papa Francisco el 6 de diciembre en la que asegura que “para un pastor es importante experimentar la cercanía, la gratitud y el cariño del pueblo que le fue confiado en la etapa de retiro”. Francisco extendió su saludo al Archimandrita Aren Shaheenian designado por su Santidad Karekin II como ‘locum tenens’ de la Arquidiócesis. “Rezaré por él, por su nueva misión, como por toda vuestra querida y recordada comunidad”.
El Arzobispo Metropolitano de la Sacra Arquidiócesis de Buenos Aires y Sudamérica de la Iglesia Ortodoxa de Constantinopla, Monseñor Iosif Bosch, subrayó la importancia de monseñor Kissag Mouradian en la actividad ecuménica e interreligiosa. Aseguró que Mouradian “es un ejemplo de simpleza, de humildad y de trabajo y dijo que lo considera como un ejemplo a seguir”.
Tras felicitar al archimandrita Aren Shaheenian por su designación, el Arzobispo de la Iglesia Siriana Ortodoxa de Antioquía en Argentina, Crisóstomo Juan Gassali, dijo que desde que llegó a la Argentina, hace diez años, Monseñor Kissag Mouradian le extendió su mano para ayudarlo en lo que fuese necesario y que siempre le brindó su cariño y generosidad y aseguró también “su tarea no culminó y que es un ejemplo de obispo”.
El traspaso se realizó ante una nutrida concurrencia de fieles entre los que se encontraban la Cónsul de la República de Armenia, Ani Hakobyan, el exjuez León Carlos Arslanian, benefactores comunitarios, dirigentes de casi todas las instituciones armenias y scouts de la Agrupación Ararat (Homenetmen) y Antranik (UGAB). Monseñor Kissag Mouradian se retiró de la Catedral a paso lento mientras era saludado por sus fieles entre los que se escuchó “el srpadzán más querido” y “misión cumplida” (vartskt gadar).
Además de los eclesiásticos nombrados, estuvieron presentes Archimandrita Demetrios, Iglesia Católica Apostólica de Antioquía; Iglesia Ortodoxa Rusa del Patriarcado de Moscú; Superintendente y Pastor designado de la Primera Iglesia Metodista, Presbítero Carlos Amarillo.
El Archimandrita Dr. Aren Shaheenian
Shant Shaheenian nació en 1970 en Bagdad, Irak. Sus padres fueron sobrevivientes del Genocidio, oriundos de la ciudad de Van en territorios usurpados por Turquía.
Realizó sus estudios primarios y secundarios en su ciudad natal, Bagdad, y al finalizarlos comenzó su formación sacerdotal durante 6 años. Paralelamente asistió a la Universidad Tecnológica de Bagdad de la que se graduó como ingeniero electrónico en 1990.
De 1992 a 1994 continuó sus estudios teológicos en la Universidad Babilonia, recibiendo su diploma en Filosofía y Psicología. Desde 1994 a 1998 se graduó como Bachiller en Teología.
En el año 2000, fue ordenado como sacerdote célibe en su ciudad natal, por el Arzobispo Avak Azadourian.
Al finalizar esta parte de su formación llegó a Roma, Italia, en 2001 y completó el Magisterio de Teología y el Doctorado en el Instituto Pontifical Oriental de Roma del que egresó con el título de Doctor en Teología en 2004.
De 2004 a 2012 ejerció como legado pontifical de la Santa Sede de Echmiadzín y pastor espiritual en la Iglesia Apostólica Armenia de Italia. Cumplió tareas en Roma, Milán, Turín, Venecia y Bari.
En 2013 se trasladó a Armenia, precisamente a la ciudad de Moughni, cumpliendo con sus tareas en el Monasterio Surp Kevork. Allí encabezó las tareas de renovación del complejo y organizó los grupos juveniles y de mujeres, así como también la escuela dominical.
El 1 de Enero de 2014 llegó a Londres, Gran Bretaña, como representante de la Santa Sede de Echmiadzín, presidiendo el Consejo Parroquial, ofreciendo formación en los programas juveniles incluyendo el estudio de La Biblia y coordinando múltiples tareas, entre ellas las colectas.
Luego de ello, su tarea pastoral lo llevó a Holanda, donde ejerció la representación de la Santa Sede de Echmiadzín hasta su llegada a Buenos Aires, Argentina, en 2019
El 1° de diciembre de 2022 fue designado “locum tenens” de la Iglesia Apostólica Armenia de la Argentina y Chile.