Abadía de Westminster: El príncipe Carlos honró las víctimas del Genocidio Armenio
Seis meses después de asistir a la ceremonia en Turquía, con la que el gobierno de Aliev pretendió desviar la atención internacional del Centenario del Genocidio Armenio recordando la Batalla de Galípoli, el príncipe Carlos de Inglaterra rindió homenaje a las víctimas armenias en un oficio religioso especial que tuvo lugar en la Abadía de Westminster el miércoles 28 de octubre.
El servicio ecuménico fue encabezado por el obispo de Londres Richard Charters y el Catolicós de Todos los Armenios Karekín II. El príncipe Charles asistió junto al presidente armenio Serge Sarkissian.
“Esta noche traemos a nuestra mente la masacre de armenios inocentes ocurrida hace cien años", expresó en la solemne ceremonia el reverendo anglicano John Hall, que agregó: "Recordamos con tristeza tanta sangre derramada. Con la Acción de Gracias recordamos los Santos Mártires y pedimos en oración por ellos". La Santa Misa contó también con un coro armenio que acompañó la liturgia.
La misa ecuménica fue parte de los eventos mundiales de la conmemoración del 100° aniversario del genocidio que diera comienzo el 24 de Abril de 1915, donde fueron masacrados más de millón y medio de armenios.
Los acontecimientos más importantes de este Centenario en Armenia y fuera de ella tuvieron lugar el pasado 24 de Abril. El gobierno turco, inmerso en su política de negación, intentó distraer la atención del mundo mediante una celebración a la que le modificó la fecha. La conmemoración anual del triunfo en la Batalla de Galípoli sobre las fuerzas británicas y francesas que habitualmente se desarrollaba en otro momento del año, fue trasladada "casualmente" al 24 de abril. El gobierno armenio reclamó oportunamente, pero sus demandas no tuvieron éxito.
Sin embargo, la decisión turca no tuvo demasiado eco en la dirigencia mundial. El príncipe Charles fue uno de los pocos líderes extranjeros que asistió por invitación del presidente Recep Tayyip Erdogan. Pero su participación molestó a muchos tanto en Armenia como en el resto del mundo.
Ahora, una de las posibles razones por las que el heredero de la reina Isabel haya tomado parte del servicio en la Abadía de Westminster, es tal vez su estrecha relación con el embajador de Armenia Armén Sarkissian, que vive en el Reino Unido desde principios de de 1990. El diplomático fue quien instrumentó la visita del príncipe Charles a Armenia en 2013.
Ninguno de los dos servicios de prensa dio a conocer el listado de los funcionarios británicos presentes. Su aparente ausencia refleja la negativa del gobierno actual que al igual que los anteriores rechaza el reconocimiento del crimen de lesa humanidad sufrido por el pueblo armenio.
"Reconocer el genocidio no proporcionaría ningún beneficio práctico para el Reino Unido", influyó en 1999 el Ministerio de Relaciones Exteriores, información que fue divulgada por el diario "The Guardian" una década más tarde. El documento citaba "la importancia de nuestras relaciones con Turquía".
En 2004, el entonces embajador británico en Armenia, Thorda Abbott-Watt, declaraba públicamente que no había suficiente evidencia para calificar a las masacres de armenios como genocidio. Las palabras del diplomático provocaron una tormenta de protestas en Armenia y la Diáspora. Armenia oficializó entonces su enojo mediante una nota oficial enviada a Londres.
Luego, en 2010 el Ministerio de Asuntos Exteriores del Reino Unido adoptó una postura más neutral sobre el delicado tema. Sin dejar de oponerse al reconocimiento británico del genocidio, el organismo dijo entonces que los funcionarios británicos deben dejar de negarlo abiertamente.
Irónicamente, muchos documentos británicos oficiales que datan de la Primera Guerra Mundial han sido una importante fuente de referencia para la tarea de reconocimiento del Genocidio Armenio.
En el Museo del Genocidio Armenio en Ereván hay una placa de reconocimiento especialmente dedicada a Lord James Bryce, autor del célebre Libro Azul, mediante el cual en 1916 el gobierno británico detallaba los asesinatos y deportaciones en masa.