Armen Sarkissian apoyó a Argentina en Glasgow: "La carga de la deuda pública es un obstáculo para combatir el cambio climático"
El presidente de Armenia, Armen Sarkissian, participó de la 26° Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP26) en Glasgow, Escocia, el 1 y 2 de octubre. Durante su alocución, el mandatario armenio hizo referencia a las propuestas del presidente argentino Alberto Fernández, quien pidió "crear mecanismos de pagos por servicios ecosistémicos, canje de deuda por acción climática e instalar el concepto de deuda ambiental". La posición de Argentina se produjo en medio de su negociación con el Fondo Monetario Internacional (FMI) por la deuda que mantiene el país con ese organismo.
En su discurso frente al plenario, Sarkissian aseguró que Armenia se encuentra comprometida a "participar más en la agenda global del cambio climático" a pesar de la pandemia y la guerra de Artsaj (Nagorno Karabaj). En ese sentido, planteó que "la significativa carga de la deuda pública es un obstáculo para que muchas economías emergentes accedan a financiamiento preferencial o no preferencial para combatir el cambio climático". Por eso, Sarkissian propuso crear una "deuda climática", una "herramienta de financiación climática que ayudará a los países en desarrollo a adaptarse mejor a las características específicas de la financiación del cambio climático, ya que crea nuevas oportunidades económicas".
"Armenia siempre ha expresado su compromiso de unirse a los esfuerzos mundiales para combatir el cambio climático. En 2021, Armenia reafirmó su compromiso a través de inversiones a nivel nacional, anunciando su objetivo de reducir las emisiones de gases de efecto invernadero en un 40% para 2030, en comparación con los niveles de 1990. El objetivo a largo plazo de Armenia es lograr la neutralidad climática en la segunda mitad de este siglo", propuso el mandatario armenio. "Nuestra visión de crecimiento sostenible y bajo en carbono está directamente vinculada a una estrategia de adaptación eficaz y creíble basada en un enfoque ecosistémico, reforestación, inversión en energías renovables y eficiencia energética, nuevas tecnologías avanzadas, así como la promoción de la movilidad nuclear".
Por último, Sarkissian denunció que el año pasado, "Azerbaiyán utilizó armas prohibidas internacionalmente durante su guerra contra Nagorno Karabaj, apuntando no solo a civiles sino también a hermosos bosques con vastas áreas, causando incendios forestales masivos y creando un desastre ambiental en el área" y pidió a la comunidad internacional que "trabaje para prevenir ese comportamiento irresponsable e inhumano". "Los desafíos ambientales no reconocen fronteras y líneas de conflicto, debemos llevar a todos los países del mundo a una cooperación integral", finalizó el Presidente armenio.