Armenia ratifica su apoyo al cese al fuego y critica a Azerbaiyán por intensificar el conflicto
El representante permanente de Armenia ante las Naciones Unidas, Mher Margaryan, aseguró que el país apoya completamente el pedido del secretario general de esta organización António Guterres sobre el cese al fuego a nivel global frente a la pandemia mundial por coronavirus y criticó la postura de Azerbaiyán de intensificar el conflicto.
El representante permanente de Armenia ante las Naciones Unidas, Mher Margaryan, aseguró que el país apoya completamente el pedido del secretario general de esta organización António Guterres sobre el cese al fuego a nivel global frente a la pandemia mundial por coronavirus y criticó la postura de Azerbaiyán de intensificar el conflicto.
"La población civil de las regiones fronterizas de Armenia y Artsaj continúan enfrentando serios riesgos humanitarios, que pueden exacerbarse aún más debido a la propagación de la pandemia y la suspensión de las operaciones de campo relacionadas con el conflicto", detalló el diplomático en el foro del Consejo de Seguridad de la ONU titulado "Protección de civiles en conflictos armados".
Por su parte, enfocándose en el conflicto de Nagorno Karabaj expresó: "Condenamos los intentos de Azerbaiyán de intensificar la situación a lo largo de la línea de contacto entre Artsaj y Azerbaiyán, que incluyen ataques contra civiles, asentamientos fronterizos, intentos de infiltración y ejercicios militares ofensivos no notificados".
"En un momento en que la comunidad internacional está consolidando sus esfuerzos para responder a la pandemia de COVID-19, tales acciones muestran un total desprecio por el pedido del secretario general por un alto el fuego global y los llamados de los Copresidentes del Grupo Minsk de la OSCE para abstenerse de cualquier acción provocativa que pueda aumentar aún más las tensiones durante este período", agregó Margaryan.
Durante su exposición reafirmó además la posición de Armenia de enfrentar la discriminación racial y étnica, la glorificación de los crímenes de odio, la negación y la justificación de crímenes pasados, especialmente alentadas por líderes estatales. En este punto se refirió más específicamente a la liberación del oficial Ramil Safarov que asesinó al armenio Gurgen Margaryan mientras dormía.
"La liberación del asesino por el decreto del presidente de Azerbaiyán y su glorificación es una falta de respeto al estándar de civilización y dignidad humana", aseguró el representante al respecto.
Para finalizar, Margaryan comentó: "Hoy, las acciones resueltas de las Naciones Unidas y las organizaciones regionales para avanzar en la prevención del discurso de odio y los crímenes basados en la identidad son cada vez más importantes para garantizar la protección efectiva de los civiles en los conflictos armados".
, aseguró que el país apoya completamente el pedido del secretario general de esta organización António Guterres sobre el cese al fuego a nivel global frente a la pandemia mundial por coronavirus y criticó la postura de Azerbaiyán de intensificar el conflicto.
"La población civil de las regiones fronterizas de Armenia y Artsaj continúan enfrentando serios riesgos humanitarios, que pueden exacerbarse aún más debido a la propagación de la pandemia y la suspensión de las operaciones de campo relacionadas con el conflicto", detalló el diplomático en el foro del Consejo de Seguridad de la ONU titulado "Protección de civiles en conflictos armados".
Por su parte, enfocándose en el conflicto de Nagorno Karabaj expresó: "Condenamos los intentos de Azerbaiyán de intensificar la situación a lo largo de la línea de contacto entre Artsaj y Azerbaiyán, que incluyen ataques contra civiles, asentamientos fronterizos, intentos de infiltración y ejercicios militares ofensivos no notificados".
"En un momento en que la comunidad internacional está consolidando sus esfuerzos para responder a la pandemia de COVID-19, tales acciones muestran un total desprecio por el pedido del secretario general por un alto el fuego global y los llamados de los Copresidentes del Grupo Minsk de la OSCE para abstenerse de cualquier acción provocativa que pueda aumentar aún más las tensiones durante este período", agregó Margaryan.
Durante su exposición reafirmó además la posición de Armenia de enfrentar la discriminación racial y étnica, la glorificación de los crímenes de odio, la negación y la justificación de crímenes pasados, especialmente alentadas por líderes estatales. En este punto se refirió más específicamente a la liberación del oficial Ramil Safarov que asesinó al armenio Gurgen Margaryan mientras dormía.
"La liberación del asesino por el decreto del presidente de Azerbaiyán y su glorificación es una falta de respeto al estándar de civilización y dignidad humana", aseguró el representante al respecto.
Para finalizar, Margaryan comentó: "Hoy, las acciones resueltas de las Naciones Unidas y las organizaciones regionales para avanzar en la prevención del discurso de odio y los crímenes basados en la identidad son cada vez más importantes para garantizar la protección efectiva de los civiles en los conflictos armados".