Armenia: Un país milenario que se moderniza cada día
Pasaron veinticinco años desde que visité Armenia. Fuimos inicialmente junto con los pastores Jorge Himitian y Milton Pope y en años sucesivos se incorporaron a estas visitas otras personas, ya que por seis años se dictaron cursos de capacitación a líderes de las Iglesias Evangélicas de Armenia.
En aquelaño realizamos una visita de dos semanas, durante julio de 1993 con elobjetivo de conocer “in situ” la situación del país, y llevar la ayuda colectada y entregarlas a personas, que habían sufrido a fines del 1988, un terremoto que produjo muchas víctimas, también se produjo el derrumbe de la “Unión Soviética” y se vivían situaciones muy críticas por la paralización de la economía.
Esta vez, después de 25 años, en agosto de 2018, el viaje fue diferente; fuimos las tres generaciones de nuestra familia, descendientes de aquellos que sufrieron el genocidio de 1915 y encontraron un nuevo hogar en tierras lejanas. Nosotros volvíamos, en cierta forma, para cumplir con la añoranza de nuestros mayores.
Todos quedamos impactados por el excelente nivel de modernización que encontramos en Armenia, en plazas y paseos, en edificios, en la hotelería, confiterías y restaurantes de la ciudad de Ereván. Nos sorprendió gratamente el buen nivel de limpieza y seguridad que la población gozaba a cualquier hora del día o de la noche, que también vimos en el interior del país. Y sobre todo la excelencia en la preservación de la historia y presentaciones en sus Museos, en especial el del Genocidio presentado en el Memorial de Dzidzernagapert que conmovió nuestras emociones.
El armenio, ha entendido la importancia que tiene su predisposición para el trato de visitantes con aprecio y respeto, que se traduce en el desarrollo continuo de la industria “sin chimeneas”, lo que es fundamental para el progreso de países sin grandes recursos naturales; si le sumamos a estas cualidades, la excelente gastronomía armenia y sus precios bajos, siempre se produce un crecimiento sostenido.
Vimos muchos turistas, no solo de ascendencia armenia, sino procedentes de países europeos, americanos y asiáticos.
Como escribe Ardashés Karsaclian en su libro “Historia, cronología de 4.000 años de Armenia”, que considerando que en la antigüedad, la historia de Armenia se escribió junto a la de los pueblos vecinos, como los Asirios, los Medos, los Partos, los Fenicios, los Hititas, los Arameos, los Babilonios, etc. , encontramos que todos estos pueblos han desaparecido del mundo y Armenia después de miles de años conservó su vitalidad y se encuentra hoy presente como nación libre e independiente en el concierto mundial. Armenia es uno de los países más antiguos del mundo, y ofrece múltiples sitios para conocer siglos de su historia: Museos, Monasterios, Fortalezas, y hermosos sitios naturales. El gran poeta armenio Ieghishé Charentz, en una de las poesías sobre su amor a Armenia, declara:
“…Amo nuestro cielo azul, las claras aguas, y nuestro lago encendido,
Y el sol de verano y los impetuosos vientos del invierno,
Y nuestras cabañas de ennegrecidos muros, perdidas en las tinieblas.
Amo las piedras milenarias de nuestras ciudades históricas...”
La historia enseña que tres hechos han sido fundamentales en su desarrollo: Primero el amor a la libertad, 
cuando el patriarca Haik por no someterse al tirano Bel, reúne su familia y alejándose del tirano, se establece en la planicie del Ararat. Luego su fe cristiana marcada por dos hechos: la predicación del Evangelio después de años en prisión de Gregorio, llamado El Iluminador, quien Dios utilizó para producir un milagro de sanidad en el Rey Drtad III, quien se convierte al cristianismo y con el toda la corte y el pueblo en el año 301; y el otro hecho en el año 451 cuando los persas buscaban imponer a Armenia su religión mazdeísta, Vartán Mamikonian y sus valientes armenios en la batalla de Avarair prefirieron morir que renunciar a su fe. Y finalmente su cultura, cuando el abate Mesrob Mashdotz reinventa el alfabeto armenio y da comienzo en el año 406 al siglo de oro de las letras armenias.
En 2015 tuvo lugar un referéndum a favor del régimen parlamentario. Actualmente el país tiene esa forma de gobierno.
En nuestras conversaciones informales con distintos ciudadanos, notamos que la mayoría se mostraban optimistas sobre el futuro del país y consideraban que se está por buen camino. Por nuestra parte pedimos a Dios, que bendiga y proteja la patria de nuestros abuelos, derrame su sabiduría sobre gobernantes y sobre el pueblo, para que el país siga creciendo y se desarrolle en paz.
Ing. Eduardo Armén Hayetian