Conferencia en el Congreso Nacional a 4 años de la desaparición de Arshak Karhanyan: "Con vida o sin vida, quiero saber qué pasó"
A 4 años de la desaparición del policía de la Ciudad de Buenos Aires de origen armenio Arshak Karhanyan se realizó una conferencia de prensa en el Congreso de la Nación el 24 de febrero para dar a conocer los avances del caso.
La conferencia contó con la participación de Vardush Davtyan, madre de Arshak, la diputada de la Ciudad de Buenos Aires Victoria Montenegro, Mariano Przybylski, director Nacional de Políticas contra la Violencia Institucional de la Secretaría de Derechos Humanos, el diputado nacional Eduardo Valdés, el senador Mariano Recalde, los legisladores Matías Barroetaveña, Juan Modarelli y Claudio Morresi, la legisladora María Bielli y la diputada nacional Paula Penacca. Por parte de la dirigencia comunitaria, participaron Eduardo Costanian en representación de la Asociación Cultural Armenia y Nechan Ichkhanian por la Logia Ararat.
"Con vida o sin vida, quiero saber qué pasó. Alguien sabe dónde está mi hijo. ¿Por qué no hablan?", fue el mensaje de Vardush Davtyan entre lágrimas. La mamá de Arshak se quebró cuando se anunció que, en los próximos meses, peritos de la gendarmería analizarán causas de personas fallecidas que no fueron identificadas para intentar encontrar al policía desaparecido. Sobre este punto, el secretario de Derechos Humanos Horacio Pietragalla declaró en una nota a Página 12 que "nunca se logró cambiar la carátula a desaparición forzada de persona, la Secretaría de Derechos Humanos lo pidió en 2021 cuando solicitó ser querellante, la fiscalía y la familia también lo requirieron pero el juez lo rechazó, con el aval de la Cámara".
Durante la conferencia de prensa se enumeraron las irregularidades del caso y se apuntó contra el juez Alberto Baños, quien inexplicablemente decidió "investigar" el caso con la Policía de la Ciudad, la misma que fue acusada de numerosos encubrimientos en la causa. Asimismo, el juez Baños rechazó caratular la causa como "desaparición forzada", lo que hubiera implicado que la causa pase al fuero federal.
"El resto de los policías que creemos que están involucrados en su desaparición, hoy siguen siendo policías de la Ciudad. Después de todas estas pruebas y escuchas donde los propios agentes dicen que existen dos investigaciones, una que le entregan a la justicia y otra que le entregan a la Policía de la Ciudad, que en 4 años nos digan que siguen confiando en esa misma policía… no solo no trabajan en encontrarlo sino que trabajaron en borrar todas las pruebas que harían posible que hoy sepamos qué hicieron con Arshak", señaló Victoria Montenegro. "No estamos dispuestos ni dispuestas a naturalizar que el Estado desaparezca personas".
Luego, Mariano Przybylski explicó los hechos que se sucedieron durante el encubrimiento del caso. "La primera gestión que debió haber hecho la Policía era secuestrar o pedir todas las cámaras de seguridad del lugar", explicó, pero de 49 cámaras aportaron 4 y se pidieron con una fecha errónea al centro de monitoreo. En ese sentido, la Policía borró el contenido del celular de Arshak cuando lo secuestró en un primer momento. Un peritaje posterior denunció esas irregularidades y se logró acceder a algunos mensajes de Whatsapp de días anteriores, pero la Policía revisó el contenido y lo borró, alegando que no había nada relacionado al caso, a pesar de que no tenía las facultades para tomar esa decisión. Cuando el fiscal Santiago Vismara pidió allanar las oficinas de la Policía, altos mandos de la fuerza se reunieron con el juez Alberto Baños, lo que fue considerado "un intento de frustrar los allanamientos" según el fiscal, objetivo que se cumplió porque Baños no ordenó los allanamientos. Otra prueba no investigada fue cuando la pareja de Leonel Herba, el policía que fue visto con Arshak Karhanyan antes de su desaparición, en una conversación telefónica lo acusó de haber desaparecido personas.
De acuerdo con Mariano Przybylski, todos estos hechos constituyen para la Secretaría de Derechos Humanos y para la Fiscalía "elementos suficientes para que esto sea investigado como desaparición forzada de personas", ya que implica un "encubrimiento o acción de algún organismo del Estado". Además, Przybylski aseguró que la Secretaría de Derechos Humanos no cuenta con ninguna hipótesis sobre el caso "por todas las irregularidades que explicamos recién".