“Día de Acción por la Tolerancia y el Respeto entre los Pueblos”, para que nadie olvide el Genocidio Armenio
8° Aniversario de la promulgación de la Ley 26.199
El 11 de enero pasado se cumplió el 8° aniversario de la promulgación de la Ley Nacional 26.199 que declaró al 24 de Abril de cada año como “Día de Acción por la Tolerancia y el Respeto entre los Pueblos”, en conmemoración del genocidio del que fue víctima el pueblo armenio y con el espíritu que su memoria sea una permanente lección sobre los pasos del presente y las metas de nuestro futuro.
La promulgación de esta ley ha sido un hecho sumamente trascendente para los argentinos de origen armenio, como también para todos los armenios del mundo. Se han reproducido gran número de editoriales, comunicados y declaraciones expresándose sobre los fundamentos y las sensaciones contenidas de distintos referentes o representantes de la comunidad armenia de Argentina, así como la de muchos intelectuales, personalidades, periodistas y políticos de Argentina, por la concreción de esta importante norma legal.
Nos hemos detenido también a analizar cuál ha sido el recorrido dentro del Estado argentino a través de sus distintos niveles y la positiva influencia por parte del colectivo argentino para sancionar el reconocimiento del Genocidio Armenio. Ahora bien, claramente, la Ley 26199 llegó para sumarse a las victorias que han tenido las políticas de defensa de los DDHH en la República Argentina.
Las políticas de memoria, verdad y justicia desarrolladas en nuestra joven y restablecida democracia luego de una etapa más que nefasta, continúan en un lógico proceso de aplicación y profundización. Proceso que consiste en seguir aquellos juzgamientos a todos los crímenes cometidos durante la última dictadura cívico militar, otorgando las merecidas sentencias a los autores materiales e ideológicos. Proceso que debe profundizarse necesariamente, con el respaldo de los distintos gobiernos que asuman la conducción del país, sin importar a que sector político pertenezcan.
Dentro de ese contexto y proceso es que la Ley 26199 fue posible. Es importante referirnos dentro de este marco general como se continúa trabajando a ocho años del reconocimiento en la Argentina. Las adhesiones de gran parte de los gobiernos provinciales, que conforman la República, a la ley de reconocimiento; significan un importante respaldo y demuestran el apoyo y la conciencia que existe hacia la Causa Armenia a lo largo del territorio argentino. La Ley 26199 ha servido también, como base para los fundamentos de una sentencia categórica y ejemplar de la justicia argentina. El 1° de abril de 2011 se declaró “la verdad histórica del delito de genocidio cometido en perjuicio del pueblo armenio y responsabiliza al Estado turco”, por medio de un histórico fallo pronunciado por el juez Oyarbide. En la actualidad, los derechos humanos y las políticas de la Memoria ocupan un lugar destacado en la agenda educativa.
Rescatar valores universales como la justicia, el respeto por el otro y la solidaridad nos posibilita atravesar fronteras para pensar en otras situaciones de violencia extrema que ha experimentado la historia de la humanidad, hechos que lamentablemente aun se repiten. La experiencia del genocidio sufrido por el pueblo armenio a través de su inserción en las curriculas escolares, de los talleres especiales en la materia permiten ejercitar la reflexión y la toma de conciencia de las nuevas generaciones, el desarrollo de la comprensión de su responsabilidad individual en la defensa de los valores que sustentan la vida en democracia, la acción por la tolerancia y el respeto entre los pueblos.
Estas nuevas generaciones de argentinos y argentinas originarios o no, nativos o naturalizados crecen en democracia, en una democracia que se construye día a día, que se fortalecerá por las políticas que se continúen proponiendo erradicar la intolerancia, la desigualdad y estrategias que promuevan aceptar al prójimo en su diversidad.
Todas estas políticas impulsadas, la ampliación de derechos en el plano interno y las que consisten en posicionamientos en defensa de los DDHH en los foros internacionales, constituyen un mandato de “no retroceder nunca mas”.
El camino elegido que venimos recorriendo ha sido muy arduo pero las significativas victorias en materia de la defensa de los derechos del hombre han profundizado estas convicciones en las fibras más intimas de nuestra sociedad.
Esta sociedad argentina que ha sufrido demasiado en su pasado, sin duda condenará a quienes prefieran callar ante la impunidad, ante la negación del crimen cometido.
Esta sociedad argentina sabrá discernir cuales son los intereses nacionales a defender y cuáles son los límites donde deben rechazarse las eternas presiones y extorsiones de quienes manipulan el destino y la vida de los pueblos.
El desafío que se nos presenta será fortalecer los logros obtenidos que significan mejores condiciones para los habitantes de la República Argentina.
El desafío será también, no ceder frente a quienes prefieren el silencio o la indiferencia ante las injusticias que taladran la salud de la humanidad.
En este 2015 se conmemora el centenario del genocidio que fuera víctima el pueblo armenio.
El Estado turco, su perpetrador, lejos de rever su pasado y de reconocer los crímenes cometidos, impulsa una agresiva política mundial para contrarrestar las acciones que los armenios generan para el ejercicio de la memoria y la búsqueda de la justicia.
El Estado turco volverá a probar la solidez de las convicciones y la coherencia de la dirigencia argentina, buscando introducir sus presiones negacionistas por cualquier grieta.
Claramente y sin excusas en la defensa de los derechos humanos no existen capítulos abiertos o cerrados, no se conciben tiempos de apoyo o de silencio, no hay lugar a tibias respuestas o miradas evasivas. La sociedad argentina y todos los que la componen han comprendido que en la defensa de derechos humanos se está a favor o en contra, quedando en franca exposición quienes quiebren este implícito pacto, pertenezcan a cualquier sector ideológico o sean parte de la oposición o del gobierno nacional.
Dr. Alfonso Tabakian
Director Regional del Consejo Nacional Armenio de Sudamérica.