El Colegio de Abogados Armenios advirtió que "cualquier tratado de paz que se firme entre Armenia y Azerbaiyán referente al estatus de Artsaj no sería válido según el derecho internacional"
El Colegio de Abogados Armenios (Armenian Bar Association) emitió un informe el 14 de abril en el que advirtió que "cualquier tratado de paz que se firme entre Armenia y Azerbaiyán referente al estatus de Artsaj no sería válido según el derecho internacional".
"En su discurso ante la Asamblea Nacional el 13 de abril de 2022, el Primer Ministro de Armenia, Nikol Pashinyan, anunció el plan del Gobierno de Armenia de concluir un tratado de paz con Azerbaiyán 'lo antes posible', e indicó que los principios básicos del tratado de paz podrían incluir, entre otras cosas, el reconocimiento de la integridad territorial de Azerbaiyán y de Armenia, y una clarificación del estatus legal final de Nagorno Karabaj, en adelante 'Artsaj', respecto del cual Armenia 'bajaría sus pretensiones'", recordó el organismo.
Según informaron los expertos en derecho internacional, "un tratado celebrado entre Armenia y Azerbaiyán sería inválido, especialmente para la determinación del estatus legal de Artsaj".
"En primer lugar, el tratado se obtendría ilegalmente mediante la amenaza y el uso real de la fuerza por parte de Azerbaiyán. La Convención de Viena sobre el Derecho de los Tratados (“CVDT”), de la que son parte Azerbaiyán y Armenia, dispone en el artículo 52: 'Es nulo todo tratado cuya celebración se haya obtenido por la amenaza o el uso de la fuerza en violación de los principios de derecho internacional incorporados en la Carta de las Naciones Unidas'", explicó el Colegio de Abogados Armenios.
"El primer ministro Pashinyan dejó en claro en su discurso que si Armenia no acepta rápidamente un tratado de paz con Azerbaiyán con el contenido solicitado por dicho país, Azerbaiyán nuevamente haría uso de la fuerza contra Artsaj y la República de Armenia, presumiblemente en Syunik. Los hechos respaldan este temor: según lo confirmado por la misión de mantenimiento de la paz de la Federación de Rusia, días después de enviar su propuesta de tratado de paz, las fuerzas armadas de Azerbaiyán invadieron el pueblo Parukh en Artsaj. Además, los soldados azerbaiyanos aún permanecen en el territorio soberano de la República de Armenia, que Azerbaiyán invadió el 12 de mayo y el 16 de noviembre de 2021. Bajo estas circunstancias, cualquier tratado de ‘paz’ con Azerbaiyán sería obtenido mediante la amenaza del uso de la fuerza contra Artsaj, en violación del Artículo 2 (3) de la Carta de la ONU, y contra la República de Armenia, en violación del Artículo 2 (4), de la Carta de la ONU. Dicho tratado sería nulo en virtud del art. 52 de la CVDT", remarcó el informe.
"En segundo lugar, el tratado privaría ilegalmente a la población indígena étnicamente armenia de Artsaj de su derecho a la libre determinación. El artículo 53 de la CVDT establece: 'Es nulo todo tratado que, en el momento de su celebración, esté en oposición con una norma imperativa de derecho internacional general'. Una de esas normas imperativas de derecho internacional general es el derecho de los pueblos a la libre determinación. En virtud de este derecho 'establecen libremente su condición política y proveen asimismo a su desarrollo económico, social y cultural'", continúa el informe.
"Un tratado entre Armenia y Azerbaiyán que pretenda determinar el estatus legal de Artsaj como parte subordinada de Azerbaiyán, privaría al pueblo de Artsaj de su derecho a la libre determinación, por dos razones: Ni el pueblo de Artsaj ni su gobierno participan en la negociación del tratado, ni siquiera en la determinación de su estatus político. Existe amplia evidencia de que Azerbaiyán le negaría al pueblo de Artsaj cualquier voz significativa en su desarrollo económico, social y cultural. El gobierno de la República Socialista Soviética de Azerbaiyán así lo hizo durante la época soviética, incluso mediante una respuesta militar al referéndum de independencia del 10 de diciembre de 1991 realizado bajo la ley soviética vigente y en el que el 99,89% de los votantes en Artsaj emitieron sus votos a favor de la independencia. Todo ello precipitó el actual conflicto no resuelto. El actual gobierno de la República de Azerbaiyán bajo Ilham Aliyev, ha llevado adelante durante décadas una política de Estado que promueve y se basa en el odio hacia los armenios indígenas de Artsaj, como lo confirman las conclusiones del Comité para la Eliminación de la Discriminación Racial de la ONU, la Comisión Europea contra el Racismo y la Intolerancia, y el Tribunal Europeo de Derechos Humanos".
En este marco, el Colegio de Abogados Armenios recomendó que, para que un futuro tratado de paz entre Armenia y Azerbaiyán sea legalmente válido en virtud de la CVDT, "como condición previa para iniciar negociaciones libres de coerción, Azerbaiyán renunciar formalmente al uso de la fuerza contra las Repúblicas de Armenia". Además, el tratado "no debe pretender determinar el estado legal final de Artsaj, y debe aplazar tal determinación hasta que las relaciones hayan mejorado sustancialmente entre los pueblos de Armenia, Azerbaiyán y Artsaj, y el gobierno de Azerbaiyán haya tomado medidas creíbles para demostrar su buena fe hacia el pueblo de Artsaj, sus derechos humanos y su dignidad". Por último, el pueblo de Artsaj "debe participar en la determinación del estatus legal final del territorio".