“El Estado turco se especializa en prometer y no cumplir, en aparecer con piel de cordero y actuar como lobo”: Darío Mosso en el Diario Tiempo Sur de Santa Cruz

El diario Tiempo Sur de Santa Cruz publicó otra interesante carta del abogado Darío Carlos Mosso el pasado 25 de septiembre que comienza explicando que “la intención de exterminar física y culturalmente al pueblo armenio no ha cesado en el año 1923. Sigue vigente a través de la decisiva acción permanente del grupo racista fascista que ejerce el poder real en el Estado turco desde la primera década del siglo XX, cuando todavía existía el Imperio Otomano”.

“Hoy, ese propósito siniestro se expresa en la zona de Nagorno Karabaj donde se constituyó la República de Artsaj, lugar milenariamente armenio, que Azerbaiyán por una decisión del período soviético, incorporó a su zona de poder a sangre y fuego. Caído el telón de acero, prosigue su guerra injusta, a veces solapadamente, para expulsar todo rastro de cultura, religión, idioma y presencia humana armenia en dicho espacio”, sigue el texto de la carta.

Tras afirmar que Azerbaiyán actúa bajo influencia de Turquía y de su “líder perpetuo” Erdogan, Mosso reflexiona asegurando que “solamente el universal reconocimiento, formalmente declarado, de que aquel Estado turco ha practicado un genocidio que merece justicia y especialmente reparación, pondrá fin a su accionar”.

“Apoyar a Artsaj en su situación de extrema vulnerabilidad con su territorio amputado, es una obligación moral de los que no quieren una humanidad donde la discriminación y el aplastamiento de las etnias y culturas sea un derecho del más fuerte”, agrega el abogado Mosso quien agradeció “la generosa actitud de Tiempo Sur por dar espacio a la cuestión del Genocidio Armenio”.

Luego de recordar la situación de los cripto armenios de Anatolia “que fueron coaccionados a islamizarse para no ser masacrados y, en especial, a las miles de mujeres que fueron marcadas como ganado y entregadas a la violación al matrimonio forzado que son testimonio sufriente de la barbarie oculta en una organización estatal que convierte en delito decir la verdad de lo sucedido”, Darío Mosso se centra en los periodistas que fueron asesinados y obligados a exiliarse  por querer indagar sobre los crímenes contra la humanidad cometidos por los seguidores políticos e ideológicos de Mustafá Kemal, “héroe para sus seguidores y verdugo de los armenios, griegos y de toda otra minoría, en una ideología supremacista que cancela todo debate y ni siquiera admite dudar de su historia oficial”.

En una nota realizada por Diario ARMENIA, Darío Mosso contó que su compromiso con la Causa Armenia surgió tras haber escuchado una conferencia sobre los genocidios del Siglo XX en la que estaba presente León Arslanian en la Feria del Libro.

Según explicó el abogado, esa charla lo retrotrajo a su niñez en Caballito en el que tenía un amigo, Roberto Kechichian, quien era hijo de un sastre armenio. “Él me hablaba sobre lo peligroso que era el gobierno turco sin dar demasiados detalles. Reviví esto y recordé el silencio y los rastros de sufrimiento en los padres de mi amigo. Desde ese momento entendí que esa era mi causa. Leí muchos libros y tiempo después conocí el pequeño grupo de armenios de Río Gallegos”.