El Presidente de Azerbaiyán visitó la ciudad ocupada de Shushí y amenazó con continuar la guerra de Artsaj
El presidente de Azerbaiyán, Ilham Aliyev, visitó el 15 de enero la ciudad de Shushí (rebautizada Shusha por él mismo), ocupada ilegalmente por su régimen luego de la guerra de Artsaj (Nagorno Karabaj). Allí, Aliyev pronunció una serie de discursos donde amenazó con reiniciar la guerra y repitió una gran cantidad de declaraciones falsas sobre la historia.
Aliyev recorrió la ciudad ocupada junto con la primera dama Mehriban Aliyeva y su hija Leyla Aliyeva, con quienes se sacó una gran cantidad de fotos a modo de propaganda. Entre otros sitios, visitaron las oficinas administrativas donde funcionaba el Gobierno local de Artsaj, como así también la catedral de Ghazanchetsots, bombardeada dos veces por el Ejército de Azerbaiyán durante la guerra. También anunció la construcción del Aeropuerto Internacional de Fuzuli junto a otro aeropuerto en Kalbajar o Lachin, y reiteró su anuncio de declaración de la ciudad ocupada de Shushí como la "capital cultural de Azerbaiyán".
Al entrar a la ciudad, Aliyev declaró: "Cuando se inauguró la Plaza de la Bandera Nacional en Bakú, dije en mi discurso que llegaría el día en que se izaría la bandera azerbaiyana en los territorios ocupados, incluida Shusha. Y este es el día. Recuerdo que algunos representantes del régimen separatista armenio dijeron en ese momento que la bandera azerbaiyana sólo se podía izar en Shusha si Azerbaiyán reconocía la llamada 'República de Nagorno Karabaj' y luego se abría una Embajada. Observen las expresiones repugnantes y arrogantes que usaron. Ahora están sentados como ratones, con los labios apretados. No pueden pronunciar una palabra".
La independencia de Artsaj de 1991, al ser declarada en base a la legislación correspondiente de la entonces Unión Soviética, fue un hecho jurídicamente legítimo dentro del derecho internacional, mientras que la Convención de Montevideo brindó el marco legal para considerar a la República de Artsaj un estado, a pesar de no haber sido reconocido por otros países. La conquista de Azerbaiyán contra una zona que se había declarado independiente es, entonces, una ocupación ilegal del territorio.
Más adelante, Aliyev afirmó que "ninguna negociación tuvo la menor importancia": "Hemos demostrado nuestra fuerza al mundo entero aplastando la cabeza del enemigo. Obligamos al enemigo a arrodillarse ante nosotros y firmar el acta de capitulación. Esto es lo que sucedió y el humillante acto de capitulación pasará a la historia para siempre".
Según el Presidente de Azerbaiyán, "el mundo entero habla de nuestra victoria. Los principales medios de comunicación de todo el mundo escriben sobre la brillante victoria de Azerbaiyán y publican informes. Ahora se están publicando artículos analíticos, se escribirán libros".
Luego, Aliyev procedió a amenazar con una nueva guerra: "Si alguien en Armenia piensa siquiera en vengarse, volverá a lidiar con nuestro puño de hierro. Este puño de hierro les rompió la espalda y les aplastó la cabeza. Si cometen alguna provocación contra nosotros, nuestra respuesta será muy dura, lo lamentarán mucho y volverán a enfrentarse a una amarga derrota. Nadie puede pararse frente a nosotros. Este será siempre el caso a partir de ahora". "Que nadie olvide este puño de hierro. Rompimos la espalda del enemigo. Si es necesario, la volveremos a romper", dijo Aliyev.
Mirando hacia la política interna, acusó al "Gobierno del Frente Popular y Musavat" de "cometer traición": "Entregaron la fortaleza inexpugnable de Shusha al enemigo para derrocar al entonces gobierno de Azerbaiyán y llegar al poder. Y esto fue lo que sucedió. La pérdida de Shusha condujo al colapso del entonces Gobierno. El Frente Popular se aprovechó de esto y llegó al poder después de la pérdida de Shusha y la rendición de Lachin al enemigo". En 1993, en medio de las fuertes derrotas militares de Azerbaiyán en la primera guerra de Artsaj, el entonces presidente Abulfaz Elchibey fue derrocado y en su lugar asumió Heydar Aliyev, ganando las elecciones por el extraño porcentaje de 98,8%. Heydar, padre del actual presidente Ilham, fue quien negoció el cese del fuego en 1994 y quien mantuvo el poder hasta la actualidad, luego de que su hijo herede la presidencia a través de una serie de elecciones denunciadas por fraudulentas por organismos internacionales.
