El presidente de Turquía Recep Tayyip Erdogan amenazó con expulsar a Embajadores de Estados Unidos, Alemania, Francia y otros 7 países
El presidente de Turquía Recep Tayyip Erdogan amenazó el 21 de octubre con expulsar a los Embajadores de Estados Unidos, Alemania, Francia, Canadá, Dinamarca, Finlandia, Nueva Zelanda, Noruega, Países Bajos y Suecia, luego de que ellos pidieran en conjunto la liberación del empresario y filántropo turco Osman Kavala.
"Le dije a nuestro Ministro de Relaciones Exteriores que no podemos darnos e lujo de tenerlos en nuestro país", declaró Erdogan, enfurecido. "¿Es cosa suya dar lecciones a Turquía? ¿Quiénes son ustedes?", agregó el Presidente turco.
Los representantes diplomáticos de los 10 países emitieron un comunicado en el que manifestaron su preocupación por "la demora persistente en el proceso judicial" del empresario Osman Kavala, acusado por el Gobierno de Erdogan de tener vínculos con el Movimiento Gülen, a quien considera terrorista. Más tarde, los Embajadores fueron convocados por el ministro de Relaciones Exteriores, Mevlut Cavusoglu, quien consideró "inaceptable" el pedido de los países.
Conocido opositor, Osman Kavala fue detenido en octubre de 2017 por tener contactos con el movimiento de Fethullah Gülen, ex aliado de Erdogan acusado de haber intentado un golpe de Estado en Turquía en 2016. En ese momento, Kavala fue acusado por supuestos vínculos con el intento de golpe de Estado y por haber participado en las protestas opositoras del Parque Gezi de forma presuntamente violenta.
Kavala fue absuelto por su participación en esas protestas en febrero de 2020, pero horas después de su absolución el fiscal jefe de Estambul pidió su detención nuevamente por su supuesto rol en el intento de golpe de Estado, a pesar de que en 2019 se había ordenado su liberación en esa causa. En ese momento fue detenido y absuelto finalmente en marzo del 2020.
Pero Kavala no fue liberado, sino detenido nuevamente por supuesto "espionaje", un día antes de que el Tribunal Europeo de Derechos Humanos declarara que "la actitud de la fiscalía podría considerarse como una prueba de la afirmación del demandante de que las medidas tomadas en su contra persiguieron un propósito ulterior, a saber, reducirlo al silencio como un activista de una organización no gubernamental y defensora de los derechos humanos, disuadir a otras personas de participar en tales actividades y paralizar a la sociedad civil en el país". El Tribunal Europeo pidió al Gobierno turco que se tomen todas las medidas para "poner fin a la detención del demandante y asegurar su liberación inmediata".
Así, Kavala se encuentra en prisión desde noviembre de 2017. En relación con este caso, el director ejecutivo de Human Rights Watch, Kenneth Roth, declaró que "el arresto inmediato de Osman Kavala en otra investigación falsa después de su absolución de cargos falsos por las protestas del parque Gezi muestra cómo el sistema de justicia penal de Turquía está políticamente manipulado, con detenciones y procesamientos perseguidos por el capricho político del presidente". En septiembre de 2021, el Comité de Ministros del Consejo de Europa dio a Turquía tiempo hasta diciembre de 2021 para liberar a Kavala antes de iniciar un procedimiento de infracción contra Turquía.