Emilia Vivi Gamba: "Cuando vivís del arte y para el arte la mirada es absolutamente distinta"

Emilia Vivi Gamba es artista plástica y docente en Artes Visuales e Historia del Arte. Expuso su muestra “Un momento en el tiempo. Primera parte” en el Espacio Cultural de la Asociación Cultural Armenia en mayo. En junio y agosto participará del espacio junto a sus alumnos del taller y cerrará en octubre con la segunda parte de su muestra “Un momento en el tiempo”.

¿Cuál es el momento en el tiempo que te guardarías para siempre?

Hace casi un año y medio quise detenerme en el tiempo para ver que había hecho hasta ese momento, revisar lo que fui haciendo desde que elegí el arte como medio de vida más que como una profesión separada de la vida cotidiana. Cuando vivís del arte y para el arte la mirada es absolutamente distinta. Disfruté mucho mi tiempo como estudiante, los momentos en que uno muestra lo que hace. A veces es aceptado, entendido. Otras veces no te comprenden, pero vos tenes tu obra puesta en un espacio determinado y lo único que queres es compartirlo con el espectador que tal vez te conoce o no pero que en todos los casos lo estas invitando con un mensaje, con una manera de hablar diferente, que es el lenguaje de lo visual.

¿Por qué decidiste hacer tu muestra en el Espacio Cultural de la Asociación Cultural Armenia?

Además de artista soy docente y desde hace más de 10 años que trabajo en el Colegio Mekhitarista. Fui conociendo la historia, la tradición y la cultura armenia. Participé de viajes con los chicos y conocí Armenia. Al Espacio Cultural llegué porque sentía la necesidad de ver que era lo que se hacía en ese espacio de cultura, si estaba ligado solamente a actividades puntuales o si me podía atrever a presentar la obra. Me sentí libre en cuanto al montaje de las obras. Yo ya tenía todo organizado porque la muestra "Un momento en el tiempo. Primera parte" tenía una connotación de técnicas de dibujo, grabado y aguafuertes muy ligado a una época puntual mía. La segunda parte de esta muestra está ligada a mi taller propio. El espacio tiene una calidez y una profesionalidad envidiable, me sentí muy cómoda.

¿Cómo fue tu experiencia en el Espacio Cultural y cómo seguirá?

Me resultó sumamente movilizante, porque si bien tengo más de 32 años de carrera, mostrar siempre implica jugarse a lo que estás exponiendo. En cierta forma te estás exponiendo vos. Estuvo muy buena la adrenalina de la preparación, me vi muy reflejada en mucha gente que se quedaba mirando la obra de una manera perpleja. Recibí mucho cariño y contención. Me quedé con ganas de la segunda parte que se viene en octubre. No fue una experiencia más, fue algo de introspección, muy fuerte, muy para adentro. En junio, agosto y octubre se van a realizar tres muestras de los expositores de los distintos talleres en pintura, dibujo y escultura con mucha variedad en las técnicas. En octubre se realizará el cierre con la muestra "Un momento en el tiempo. Segunda parte". El tiempo jugó mucho en todo esto, en mi presencia en las exposiciones individuales y en una ausencia aparente en la de los grupos que estoy como curadora, armando el engranaje de estas muestras.