Generales turcos lideraron la guerra en Artsaj: fue una victoria turca, no azerbaiyana
Una periodista turca exiliada Cevheri Guven reveló en un informe los nombres y actividades de tres generales turcos que tuvieron un papel decisivo en los ataques de Azerbaiyán sobre Artsaj a partir del 27 de septiembre de 2020. Ya se sabe que los drones y misiles modernos comprados por Azerbaiyán a Israel, Turquía y Rusia tuvieron un efecto devastador en Armenia y Artsaj. También se conoce que 200 asesores militares turcos y miles de mercenarios sirios participaron en la guerra. Sin embargo, esta es la primera vez que se publica un informe detallado sobre la presencia de generales turcos en Azerbaiyán durante la guerra.
Los líderes militares turcos son el teniente general Sheref Ongay, el general de división Bahtiyar Ersay y el general de división Goksel Kahya. Su presencia en Bakú está relacionada con la destitución antes de la guerra del coronel general Nejmeddin Sadikov, primer viceministro de Defensa y jefe del Estado Mayor de Azerbaiyán, que había estado en su puesto durante 27 años. Fue acusado de traición y cooperación con la inteligencia militar rusa, según fuentes rusas y azeríes disidentes.
Según los informes, Sadikov fue detenido tras su despido, que fue denegado por el Ministerio de Defensa de Azerbaiyán. Sin embargo, no se le ha visto en público desde ese momento. Sadikov nació en Derbent, Daguestán, es de origen Lezgin y tiene un conocimiento escaso del idioma azerí. También se alega que su primo está sirviendo en el ejército ruso en Gyumri, Armenia.
Sadikov se educó en Rusia. Es importante señalar que un gran número de soldados azeríes fueron enviados a Turquía para recibir su educación militar. Sadikov no permitió a los que regresaban de Turquía servir en posiciones militares críticas. Además, se opone al dominio turco en el liderazgo de las Fuerzas Armadas de Azerbaiyán. Como resultado, Turquía solicitó el despido de Sadikov y tras esto se asignaron puestos de liderazgo a los militares formados en Turquía.
Volviendo a los tres generales turcos, Sheref Ongay es el comandante del Tercer Ejército turco, desplegado en Erzingan. Tenía el control de la guerra de ArtsaJ. Ongay se graduó de una academia militar en Ankara en 1982 y sirvió en varias unidades de las fuerzas terrestres. En 2014 fue nombrado comandante del Noveno Cuerpo de Ejército y durante un tiempo fue director de la escuela de infantería en Tuzla.
El segundo líder militar turco en Azerbaiyán, el mayor general Bahtiyar Ersay, había sido encarcelado por estar involucrado en un escándalo (Operación Sledgehammer). Sin embargo, fue indultado y puesto en libertad, posiblemente logrando un trato con las autoridades, revelando los nombres de los demás participantes en la conspiración. Posteriormente fue ascendido al rango de General de Brigada y pasó a estar a cargo de la Segunda Brigada de Comando que luchó con gran brutalidad contra el PKK (Partido de los Trabajadores del Kurdistán) en el este de Turquía.
Actualmente es el jefe de operaciones al mando de las fuerzas terrestres turcas. Permaneció en Bakú durante la Guerra de Artsaj y dirigió personalmente las operaciones. Antes del comienzo de la guerra, se construyeron dos centros de comunicaciones por satélite en Bakú y en el aeropuerto militar de Gabala para contactar a los soldados en tierra y al cuartel general en Turquía. Ambos centros fueron administrados exclusivamente por el ejército turco. Se ordenó al ejército azerbaiyano obedecer todas las órdenes de los superiores turcos y no discutir con ellos ni contradecirlos. Ersay estaba a cargo de los mercenarios que habían luchado anteriormente en Siria y Libia para Turquía. Además gestionó el equipo militar de alta tecnología proporcionado por Turquía a Azerbaiyán.
El tercer militar en cuestión es el general de división Goksel Kahya, que se encontraba en Azerbaiyán desde julio de este año, un allegado al ministro de Defensa de Turquía. Previamente, fue subsecretario adjunto del Ministerio de Defensa. Mientras participaba en la guerra de Libia, fue capturado por las fuerzas libias opositoras y luego liberado. Kahya estaba a cargo de los drones turcos que operaban en este país árabe, lo que le dio una valiosa experiencia en la gestión de drones contra Artsaj.
Desde el final de la guerra, varios azeríes han expresado su descontento por el hecho de que el personal de mantenimiento de la paz ruso se encuentra en el territorio de Nagorno Karabaj. Algunos analistas han descrito la presencia rusa en Azerbaiyán, Armenia y Georgia como una derrota de Turquía y Estados Unidos, y una victoria de Rusia, por haber ubicado sus fuerzas "bajo las narices de Turquía, miembro de la OTAN". Como concluyó el sitio ruso Vzglyad: El plan de la guerra en Artsaj, los generales eran turcos y los drones se fabricaron en Turquía. Bakú puede celebrar la victoria, pero en términos de mando y control, los generales turcos también pueden hacerlo".
El teniente coronel retirado del ejército azerbaiyano Oleg Guliyev, que ahora vive en Moscú, le expresó a Vzglyad: “Azerbaiyán debe recuperar completamente Nagorno Karabaj. Esto es correcto y justo. Pero debemos recuperarlo nosotros mismos. Si lo reclamamos con la correa de Turquía, solo recuperaremos Karabaj y perderemos el resto de nuestro país".
Harut Sassounian