“Hay un nuevo feminismo en Armenia que se ve reflejado en la diáspora”

30 de julio de 2020

Anush Grati y Mariángel Magaquián, miembros de Armenies Queer, participaron del ciclo de cine online organizado por la Fundación Luisa Hairabedian y debatieron acerca del documental “Listen to me”, sobre la realidad actual de la comunidad LGBT en Armenia. La charla, coordinada por Marga Djeredjian, formó parte del nuevo eje propuesto por la institución sobre “Géneros y diversidades”.

El film analizado, lanzado en 2016 e impulsado por la organización Pink Armenia, retrata la vida, problemáticas y relación con la familia y la sociedad de diferentes personas de la comunidad LGBT en el país.

Abriendo el debate, se rescató el caso de Armine Oganesova, propietaria del bar LGBT “DIY” que fue atacado e incendiado en 2012 en Ereván. “Es una mujer con una voz muy fuerte y se ve como esto pareciera ser una amenaza para la sociedad. Cuestiones como que la hayan echado de su trabajo solo porque su hermana era lesbiana demuestran que las mujeres tienen muy pocos espacios para ser protegidas ante necesidades que pueden ser básicas, sobretodo cuando tiene una orientación sexual diferente, donde la heteronorma rige en todos los aspectos”.

Siguiendo con esta línea, Magaquián remarcó también esta cuestión y explicó que en muchas noticias que circulan en Armenia se puede ver cómo ante casos de violencia doméstica y de género, la culpa es de la mujer y es ella la que debe irse de la casa, más allá de su situación de víctima.

Por su parte, recordando su segundo viaje a Armenia, Grati comentó cómo eso significó una culminación de su búsqueda de volver a la tierra de sus antepasados, pero también una disrupción en cuanto a su conocimiento de la Armenia actual. “Me encontré con un país en el que es muy difícil que una persona queer pueda vivir. La comunidad LGBT existe y es algo que parece una tontera, pero está mucho el discurso de que esto es algo externo y occidental”.

“Las siglas LGBT en armenio se usan en inglés, porque el armenio no concebía esas palabras. Si bien la constitución armenia tiene artículos en contra de la discriminación, estos no incluyen los términos de sexo, género e identidad. A pesar de eso, Armenia me dió esa primera familia LGBT, porque ante tanta adversidad es necesaria la conformación de redes”, continuó, sobre su estadía en el país.

Armenies Queer se originó precisamente mientras que traducían y editaban este documental al castellano, tiempo en el que conocen a Tamara Derderian, de Córdoba. “No teníamos la intención de armar un colectivo, simplemente de juntarnos y pensar cómo podíamos acompañarnos, no solo en la armenidad, sino en la vida diaria. A partir de ahí comenzamos a ver que hacía falta un espacio hispanoparlante dentro de las comunidades diaspóricas. Comenzamos a traducir las cosas que veíamos y así fue como se fue gestando el proyecto”, explicó Magaquián.

A su vez, con respecto a los valores del grupo agregó: “Creemos que los valores armenios son de unidad y si nos reconocemos como hermanes podemos dejar de lado nuestras diferencias de género y sexualidad. Lo más valioso es que nuestra sexualidad no puede estar separada de cómo decidimos llevar la vida”.

Más tarde hicieron referencia al caso de Lilit Martirosyan, la mujer trans encargada de hablar en la Asamblea Nacional de Armenia sobre la violencia sistemática que sufren, y cuyo caso, pese a que no llegó a ser incluido en el film, tuvo una gran repercusión en Europa y en el resto del mundo.

Haciendo alusión a eso, Marga Djeredjian expresó: “Si bien en la película tenemos a los pioneros, gracias a este documental, gracias al discurso de Lilit en el parlamento, se están dando a conocer casos, pese a que estamos hablando de una sociedad y un país que queremos muchísimo pero que no deja de estar en el contexto del Cáucaso Sur, con todo lo que implica pertenecer a todas estas sociedades”.

Por otro lado, en cuanto al presente de la comunidad LGBT en Armenia y las diferentes leyes que tiene la nación en este sentido, Grati recalcó: “Lo preocupante es que en Armenia hay un aval social muy grande ante acciones punitivistas en contra de aquellos que muestren alguna tensión fuera del marco de la heterosexualidad. Las organizaciones tanto feministas y LGBT trabajan en forma conjunta y transversal porque entienden que la base de todo este odio es la misoginia y las personas más castigadas son aquellas que muestran lo socialmente percibido como femenino”.

Respecto a la difusión del documental en español, Magaquián comentó: “Creo que es interesante cada vez que hablamos del documental en diferentes espacios. Estos temas suceden no solamente es Armenia sino también en América Latina y muchas partes del mundo. Por eso creemos que por más que el documental habla de la situación armenia también se puede ver en lugares donde continuamos con crímenes de odio”.

“Hay una iniciativa a través del nuevo feminismo en Armenia que se ve reflejado en nuestras comunidades diaspóricas de una manera muy contundente y con muchas ganas de que estas cosas cambien. Esto no significa romper estructuras, sino fortalecerlas, traer que hay otra reflexión y que es sumamente importante porque forma parte de nuestros valores”, agregó en esta misma línea.

Cerrando con la charla, se recalcó la gran cantidad de personas interesadas en el documental y aseguraron que seguirán trabajando. De esta forma, Mariángel concluyó: “Pienso que estamos atravesando un cambio generacional que lo vemos en las escuelas, en los clubes, las actividades y redes sociales. Una necesidad de alzar la voz y no pedir permiso. Creo que es algo que está atravesando las familias y que pide, como dice la película: ‘escuchame’”.

Compartir: