Mensaje del Presidente de Armenia: "Fue el año más duro de nuestra historia reciente"
El presidente de Armenia, Armen Sarkissian, publicó su tradicional discurso de fin de año el 31 de diciembre, donde calificó al 2020 como el año "más duro de nuestra historia reciente".
"Nuestra gente no perdió, tampoco nuestros soldados, tampoco nuestros ciudadanos. Los armenios no perdieron. Durante la guerra, los hijos de nuestro pueblo demostraron un espíritu de lucha indescriptible, un heroísmo excepcional, coraje y resistencia. El resultado de la guerra y de la situación actual se debe a la desorganización, la irresponsabilidad y la falta de profesionalismo en diversas esferas de la gobernanza estatal", dijo Sarkissian.
"Me inclino de nuevo ante la memoria de nuestros héroes caídos. Les deseo a nuestros soldados heridos una pronta recuperación. Necesitan nuestra atención y cuidado diario. Expreso mi agradecimiento a todos nuestros compatriotas que mantuvieron firme la retaguardia de los soldados. El Estado y el Gobierno deben hacer todos los esfuerzos posibles para determinar el destino de los desaparecidos y devolver rápidamente a todos los cautivos y rehenes a casa. El Estado y el Gobierno deben garantizar la protección y seguridad de los habitantes y comunidades de las fronteras y zonas fronterizas del país", remarcó el Presidente.
"La unidad no tiene alternativa. La memoria de nuestros héroes caídos obliga a todos los armenios a unirse en torno a la patria y consolidar nuestras fuerzas. Para superar la situación actual, es necesario tener una visión clara, una estrategia y un plan realista. Cualquier palabra, promesa o apelación es en vano si cada uno de nosotros no está en nuestro lugar y no actuamos con toda nuestra responsabilidad", manifestó el mandatario.
Sarkissian recordó que "restaurar la estadidad hace treinta años fue un sueño para nosotros" ya que el 2021 se celebrarán los 30 años de la independencia de Armenia.
"El pueblo armenio ha tenido gloriosas victorias y dolorosas derrotas a lo largo de su historia. Nuestra existencia es una historia y una prueba de victoria. Y estoy seguro de que los armenios y Armenia aún celebrarán nuevas victorias", cerró.