“Parece que Azerbaidján no es un socio clave para Estados Unidos”, dice el exembajador Kauzlarich
Diario ARMENIA.- La caída del precio del petróleo parece afectar severamente la economía de muchos países productores. La disminución atenta contra el desarrollo de aquellos estados que tienen en la extracción de hidrocarburos su mayor ingreso de divisas. Azerbaidján es uno de ellos y desde hace mucho tiempo su líder Ilham Aliev se apoya en esos recursos para rearmarse y amenazar a Armenia y Artsaj. El nuevo contexto económico parece haber conmovido al mandatario y a los suyos que hicieron públicas sus críticas a Washington.
El exembajador de EE.UU. en Azerbaidján entre 1994 y 1997, Richard Kauzlarich (foto), publicó un artículo en el sitio especializado “Brookings Institution” donde analiza la relación entre ambos países tomando como referencia un informe antiestadounidense que tiene la firma de Ramiz Mehdiyev, jefe del Estado Mayor Presidencial de Aliev.
“La relación entre Washington y Bakú está claramente atravesando una crisis”, dice Kauzlarich y señala que Mehdiyev acusa a Estados Unidos de interferir los asuntos internos de Azerbaidján y utilizar las fuerzas de la oposición para promover una “revolución de color”.
El diplomático recuerda que a la publicación del reporte mencionado les siguieron el allanamiento y persecución a los periodistas de “Radio Libertad” acusados por “interferir” y “criticar” al régimen cuestionando la legalidad de las elecciones que permitieron que Aliev continúe en el poder. Otros periodistas fueron arrestados por opinar en contra de las autoridades.
Las acusaciones azeríes recayeron también contra varios analistas y activistas opositores que fueron encarcelados con cargos de traición y apoyo a Armenia o por espiar para Estados Unidos. También fueron afectados por las violentas diatribas oficiales varios funcionarios estadounidenses, incluyendo legisladores, embajadores, integrantes del Grupo de Minsk y hasta el propio presidente Barack Obama.
Kauzlarich indica que la administración Aliev está muy preocupada por la reciente caída de los precios del petróleo que le provocarán un brusco descenso de los ingresos públicos, que dependen casi por completo de esas exportaciones, generando un estrés económico adicional.
En este contexto, las relaciones entre Azerbaidján y Estados Unidos deben basarse en la nueva realidad imaginada por Mehdiyev. El asesor cree que en el nuevo escenario energético mundial, el acceso a los recursos de gas y petróleo azeríes ya no constituyen motivaciones políticas cruciales como lo fueran hace dos décadas.
Además, teniendo en cuenta la posibilidad de la normalización de relaciones entre Washington y Teherán, la retirada de las tropas estadounidenses de Afganistán y otros sucesos políticos del área, la importancia de Azerbaidján para Estados Unidos disminuye drásticamente en los campos de la energía y la seguridad regional.