33° Congreso Mundial de la FRA - Tashnagtsutiún

Se aprobó un cupo mínimo femenino en todas las instancias del partido, señalando el retorno a sus raíces progresistas

19 de febrero de 2019

Logo FRAEreván (Asbarez).- Nos hemos acostumbrado a criticar a los partidos políticos en el mundo armenio, y, a menudo, la crítica se justifica. Sin embargo es también muy importante apreciar lo que les sale bien. Y cuando nos referimos a una innovadora resolución de cupos de género recientemente aprobada en el 33° Congreso Mundial de la Federación Revolucionaria Armenia (FRA-Tashnagtsutyún), “bien” nos parece poco como apreciación.

El máximo encuentro de la organización fundada en 1890 tuvo lugar en enero de este año en Artsaj donde reunió a más de un centenar de delegados e invitados de más de treinta países. En el transcurso del congreso se llegó a la conclusión de que era necesario hacer más para garantizar una mayor representación femenina en la toma de decisiones de esta fuerza política panarmenia.

Sucede que solo ocho de los cien participantes del congreso eran mujeres, y aunque este número es considerablemente más alto que el del encuentro de 2015, resultó inaceptablemente poco para la mayoría de los delegados que participaban del encuentro.

El hecho de que la FRA nunca haya elegido a una mujer para el Buró, su máximo órgano, también es inaceptable, especialmente porque el partido lideró en 1918-20 uno de los gobiernos más progresistas en políticas de género en el mundo. La Primera República de Armenia (1918-1920) eligió a tres mujeres como legisladores, décadas antes que el resto de los países del mundo, donde en ese entonces recién se debatía si las mujeres debían participar de las elecciones o no.

Muchas de las resoluciones que se adoptaron en el último congreso de la FRA señalan la disposición de Tashnagtsutiún de regresar a sus raíces progresistas. Sin embargo, ninguna es tan simbólicamente relevante en este sentido que la decisión del cupo femenino. Con ella, la FRA se ha convertido en el primer partido político moderno de Armenia dotado de una regulación interna de este tipo que va a promover significativamente a las mujeres a puestos de liderazgo.

La resolución de la FRA dice que en todas las reuniones del partido (Asambleas locales, Convenciones Regionales y Congreso Mundial) y en los distintos órganos (Comités, Comités Centrales y Buró) se deberán elegir delegadas en un porcentaje proporcional a la representación femenina que tenga el respectivo encuentro o la jurisdicción partidaria donde se lleva adelante el proces.

Por ejemplo, si una región está compuesta por un 20% de mujeres, el 20% de su Convención regional y el mismo porcentaje de su Comité Central deben ser mujeres. Esto tiene que ser replicado en todos los niveles.

Más aún, la resolución estipula que el próximo Congreso Mundial deberá tener un cupo universal de género que se aplicará en todos los ámbitos (por ejemplo, si se establece en un 25 por ciento, entonces por lo menos un 25% de los órganos directivos tendrán que ser mujeres, independientemente de la región).

La única razón por la que no se pudo adoptar esta medida en el congreso fue porque todavía existen algunas regiones donde las mujeres representan un porcentaje muy pequeño respecto al total de miembros. Esto indica que estas jurisdicciones partidarias tendrán ahora tres años para aumentar la cantidad de sus integrantes mujeres.

Para dar una idea de la importancia de esto, se puede resaltar que si una política similar se hubiera adoptado antes de este 33° Congreso, un 20% del mismo, por lo menos, hubieran sido mujeres, lo que significa más del doble del número que participó en Stepanakert. Además en el Buró habría mínimamente tres mujeres entre los trece miembros totales.

Esto se basa en las figuras actuales, que muestran que un 20% de los miembros del partido a nivel global son mujeres. Con el esfuerzo y la confianza de las diferentes zonas, se debería aumentar el número de las ingresantes al partido, por lo que el 20% antes planteado incluso podría crecer. Este será el desafío para los próximos tres años.

Esto debería ser fácil una vez que varias de las decisiones aprobadas en el último congreso sean conocidas por el público. La FRA sigue peleando por el derecho a la autodeterminación de la República de Artsaj y por la búsqueda de justicia por el Genocidio Armenio. Sin embargo, se ha comprometido nuevamente con sus bases, con el pueblo.

El Tashnagtsutiún que actualmente no tiene representación en la Asamblea Nacional de Armenia, adoptó una estrategia audaz que volverá a enfocar las necesidades sociales con el objetivo de convertirse en una fuerza alternativa parlamentaria viable en el futuro. Defenderá los derechos del trabajador, del jubilado, del pensionado, de la mujer, del niño, del soldado y del estudiante. También del ciudadano, de la pequeña empresa y del medio ambiente.

En resumen, el partido resolvió volver a sus raíces progresistas, las que lo han ayudado para que sea la organización política panarmenia más exitosa.

Haig Kayserian*

 

*Haig Kayserian es director ejecutivo del Consejo Nacional Armenio de Australia. Es licenciado en Estudios de Medios y Cultura de Macquarie University y está completando una Maestría en Política en Deaken University. Es el director de varias empresas de tecnología basadas en Estados Unidos y Australia y miembro consejero en el board de asesores de la primera empresa de tecnología de Armenia.

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