Se conmemoró el 18º aniversario del asesinato de Hrant Dink en Turquía: “Esta hermandad y solidaridad es el mayor indicador de nuestra resistencia contra la tiranía, las masacres y la injusticia”
El 19 de enero se conmemoró el 18º aniversario del asesinato del periodista armenio Hrant Dink en Turquía frente al antiguo edificio de su periódico Agos en Estambul. El homenaje tuvo como lema "Memoria, Verdad, Vida, Anhelo"
Durante la ceremonia, se portaron pancartas escritas en kurdo, armenio y turco, con las palabras "Verdad", "Vida", "Anhelo" y "Memoria".
La periodista Çiğdem Mater, arrestada en noviembre de 2018 por el gobierno turco en relación con la persecución contra personas y organizaciones relacionadas con el filántropo Osman Kavala y con las protestas del parque Gezi de 2013, envió una carta desde la prisión: “Han pasado 18 años desde que nos quitaron a Hrant Dink. Ese día, quizás por primera vez en nuestra historia, decenas de miles aceptaron y crearon una identidad armenia”.
El actor Eraslan Sağlam también leyó la carta enviada por el empresario y filántropo Osman Kavala desde la prisión de Mármara. “Me siento allí, contigo, en el lugar donde le dispararon a Hrant, junto a Hrant. A pesar de todo tipo de tiranía, espero ver días en que prevalezca la justicia”. “Esta hermandad y solidaridad en la que nos unimos para asegurarnos de que no seamos olvidados es el mayor indicador de nuestra resistencia contra la tiranía, las masacres y la injusticia. Sentirse junto a Hrant en el lugar donde le dispararon refuerza nuestra creencia de que la justicia y la verdad prevalecerán tarde o temprano. Seguimos manteniendo viva esta esperanza y resistencia".
El escritor Takuhi Tovmasyan, por su parte, dijo: "A plena luz del día, en pleno Estambul, ante nuestros ojos, asesinaron a un periodista armenio. ¿Cuál fue su crimen? Su crimen era evidente: su amor por la humanidad, su pasión por la democracia y los derechos humanos, su creencia en la libertad de expresión y, por si fuera poco, su defensa de la paz entre los dos pueblos y su deseo de abrir la frontera entre Turquía y Armenia. A todo esto se suma la capacidad que Dios le dio para persuadir a la gente. Esto último asustó muchísimo a algunas personas".
El caso de Hrant Dink
El trabajo de Hrant Dink como periodista lo llevó a fundar el semanario Agos en 1996, un periódico bilingüe que dirigió hasta su muerte y que se dedicó a tratar temas que hasta ese momento no se planteaban en Turquía, especialmente las cuestiones de derechos humanos y la agenda de las minorías en el país. El asesinato del periodista conmovió a la sociedad turca en 2007. El 19 de enero de ese año, el joven Ogün Samast, de 17 años, le disparó a Hrant Dink en la puerta de su periódico. Samast confesó el crimen y fue condenado a 22 años y 10 meses de prisión el 25 de julio de 2011. El 16 de enero de 2012, Yasin Hayal, miembro de un partido ultranacionalista, fue condenado a cadena perpetua por haber ordenado el asesinato. Dos años después, el Tribunal Supremo de Turquía emitió un fallo en que se indicó que no se había investigado correctamente el caso de Hrant Dink. El 17 de julio de 2019, se entregaron las sentencias a varios de los partícipes de su asesinato, aunque nunca se investigaron las complicidades políticas y policiales. En el momento del crimen, Ogün Samast afirmó haber asesinado a Dink por “insultar a Turquía”, no mostró arrepentimiento por el hecho y posó junto a policías con una bandera turca para reivindicar su accionar. En 2020, se denunciaron amenazas contra la viuda Rakel Dink y contra la Fundación Dink. El 15 de noviembre de 2023, Samast fue liberado.
Después de 14 años de juicios, un tribunal finalmente llegó a un veredicto, condenando a cadena perpetua a varios ex funcionarios de seguridad. Entre ellos se encontraban dos ex jefes de policía y dos ex agentes de seguridad. El exjefe de inteligencia policial Ramazan Akyürek y su adjunto Ali Fuat Yilmazer fueron condenados a cadena perpetua por “asesinato premeditado”. Los ex oficiales militares Yavuz Karakaya y Muharrem Demirkale también fueron condenados a cadena perpetua. Ali Öz, ex comandante de la gendarmería que supervisaba la provincia de Trabzon, de donde procedía el pistolero, fue condenado a 28 años de prisión. El tribunal no se pronunció sobre el clérigo radicado en Estados Unidos Fethullah Gülen y otras 12 personas consideradas fugitivos en el caso. Sin embargo, afirmó que varios sospechosos estaban vinculados al movimiento de Gülen, considerado un “grupo terrorista” en Turquía y responsable del intento de golpe de 2016. La familia Dink expresó su descontento con el veredicto, afirmando que no revelaba toda la magnitud del complot detrás del asesinato de Hrant Dink. Finalmente apelaron la decisión, que absolvió a 37 de los 77 acusados y condenó a 26. El abogado de la familia, Hakan Bakırcıoğlu, dijo que el veredicto fue “insuficiente” y que la investigación y el procesamiento estuvieron “influidos por factores políticos”.